martes, 26 de febrero de 2013

TALLER DE SOSTENIMIENTO DE LA IGLESIA

EL SOSTENIMIENTO DE LA OBRA EVANGELIZADORA DE LA IGLESIA CATÓLICA, UNA TAREA DE TODOS.
 
El CELAM -Consejo Episcopal Latinoamericano- organizó en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, el VIII Taller de Sostenimiento de la Iglesia. Al Encuentro asistieron delegados de las Conferencias Episcopales de doce países de América Latina y el Caribe.
A continuación un comentario publicado por el CELAM, de la homilía del Nuncio Apostólico en Argentina:

Recordando que el encuentro propone fortalecer la conciencia de pertenencia y corresponsabilidad en la Iglesia, y lograr una autofinanciación de las obras eclesiales.

El nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, consideró esta mañana que la reunión que congrega a obispos, sacerdotes y religiosos de América Latina y el Caribe en Buenos Aires para debatir sobre el autosostenimiento de la Iglesia es “de altísima importancia” para la Iglesia en América Latina. Sugirió que las entradas deben destinarse, en orden de prioridad, a la proclamación del Evangelio, la liturgia y la caridad. Ante las señales de corrupción que se repiten en América, aconsejó ser “escuela de democracia” y ¨testimonio eficaz” a través de “una buena y transparente administración de los bienes terrenales de la Iglesia”.
El nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, consideró esta mañana que la reunión que congrega a obispos, sacerdotes y religiosos de América Latina y el Caribe en Buenos Aires para debatir sobre el autosostenimiento de la Iglesia es “de altísima importancia” para la Iglesia en América Latina. 

“Puedo decir, sin cumplimientos, que considero este encuentro de altísima importancia para la Iglesia en América Latina “, dijo en la homilía de la misa que celebró esta mañana en el marco del octavo “Taller de autosostenimiento de la obra evangelizadora de la Iglesia”. 

A pesar de excusarse sobre la situación de la Iglesia en el continente, que confesó no conocer en profundidad (su ministerio en la Argentina comenzó hace 11 meses), el representante papal consideró que la misión continental que se propone el Consejo Episcopal Latinoamericano “no podrá salir bien sin los necesarios medios materiales”. 

“En el Evangelio de hoy, Cristo nos recuerda que todo lo que necesitamos podemos pedirlo al Padre celestial, quien antes de nuestro pedido sabe qué es lo que nos hace falta. Pero esta fe en la providencia divina no nos dispensa de la propia responsabilidad como individuos y como comunidad”, indicó el prelado. 

Recordando que el encuentro propone fortalecer la conciencia de pertenencia y corresponsabilidad en la Iglesia, y lograr una autofinanciación de las obras eclesiales “como signo efectivo de comunión y fraternidad”, el nuncio destacó que se requiere una administración que sea honesta y transparente. 

“Nuestros fieles tendrán dificultad en contribuir a las colectas de la diócesis o de la parroquia, si la administración es aproximativa, confusa o irresponsable –advirtió el nuncio-. La santificación del mundo, entonces, incluye también el testimonio de nuestra relación con los bienes terrenales”. 
“Como no se puede separar la fe de la vida, así tampoco se pueden separar las cosas espirituales de las materiales. El discípulo de Cristo debe ser perfecto en esto porque es testigo de la nueva creación”, exhortó en su predicación. 

Asimismo, el representante pontificio sugirió que las entradas deben destinarse, en orden de prioridad, a la proclamación del Evangelio, la liturgia y la caridad. “La recomendación sería entonces, que cada colecta o contribución de los fieles sea asignada según una clave diocesana de distribución, a estos tres mandatos de la Iglesia”, dijo, al tiempo que estimó que las obras de caridad “no deberían ser una actividad distinta y separada”. 

Monseñor Tscherrig también habló a favor de establecer un “cambio de mentalidad” desde la formación de los seminaristas, los novicios y los catequistas y en las escuelas y universidades católicas. Ante las señales de corrupción que se repiten en América, el nuncio aconsejó ser “escuela de democracia” y "testimonio eficaz” a través de “una buena y transparente administración de los bienes terrenales de la Iglesia”. 

Finalmente, el nuncio recordó que la Iglesia “es abogada de la justicia y de los pobres”, en referencia al discurso dado por el Papa en su visita al santuario de Aparecida, Brasil, en 2005. “Creo que el autosostenimiento es propiamente necesario para lograr esta independencia y para dar a la Iglesia el espacio de libertad profética en la sociedad y credibilidad en su misión como fuerza de renovación y de esperanza”, afirmó.

http://www.celam.org/detalle.php?id=NjIz